El último fin de semana de las vacaciones lo dediqué a la playa y más la de Punta Umbría, que me encanta. Fuimos con casi toda la familia, incluidos los sobrinos. Estuvimos la mañana del Domingo cogiendo un poco de arena fina y conchas. A pesar del tiempo, que amenazaba lluvia, en la playa siempre da gusto estar. Y después, un paseo por la Calle Ancha, antes de comer y regresar al pueblo.
